Santo Domingo, R.D. El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) condenó el atropello cometido contra periodistas y reporteros gráficos que cubrían las incidencias de la insubordinación de miembros de la Policía Nacional de San Francisco de Macorís contra la Justicia.
Olivo De León, secretario general del gremio, informó que los agentes insubordinados maltrataron a periodistas y reporteros gráficos de televisión a quienes trataron de impedir que filmaran sus acciones de secuestrar a un raso policial detenido en el cuartel del Palacio de Justicia de esa localidad y trasladarlo al cuartel general de la institución de esa provincia.
Precisó que en esas acciones fue empujado el camarógrafo Alexis Ovalles, de Telenord, tras lo cual los agentes policiales cerraron la puerta del cuartel y dejaron fuera a periodistas y reporteros gráficos para impedir que grabaran mientras introducían al raso Marino Alfonso Torres, acusado de asesinar a Puro Emmanuel Díaz en un supuesto intercambio de disparos hace varios días
Detalló que a los periodistas y reporteros gráficos de Telenord sólo se les permitió el acceso al cuartel general de la Policía en San Francisco de Macorís cuando llegó al lugar el general de la Cruz Reyna, comandante regional Nordeste de la institución con asiento en esa ciudad.
Dijo que con su actitud los miembros de la Policía de San Francisco de Macorís violan distintos artículos de la Constitución de la República, la ley 6132 sobre expresión y difusión del pensamiento, la ley 10-91, la ley orgánica de la Policía Nacional, entre otras legislaciones.
Recordó que la Policía es un organismo auxiliar de la Justicia, un instrumento para asegurar el cumplimiento de la ley, por lo que los responsables de esta insubordinación deben ser sancionados drástica y ejemplarmente para evitar que situaciones como esas se repitan y pongan en peligro la estabilidad democrática del país y la violación de derechos fundamentales como el derecho a la información, a ser informados y el derecho al trabajo, entre otros.
Pidió al presidente Leonel Fernández que aplique los correctivos de lugar en este caso, al jefe de la Policía Nacional, mayor general José Polanco Gómez, que asuma responsablemente esa situación, y al procurador general de la República, Radhamés Jiménez, a evitar que esto se limite a un simple traslado de agentes.
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