El asesinato del periodista José Silvestre, alias “Gajo”, cuyo cadáver fue encontrado ayer con signos de tortura, descalzo y con tres disparos en su cuerpo luego de que el comunicador fuera secuestrado, estaría relacionado con las constantes denuncias que realizaba sobre casos vinculados con el narcotráfico. Sus familiares consideran que su muerte estaría relacionada con sus denuncias sobre narcotráfico y su vínculo con sectores de poder, hechas a través del programa que producía, La Hora de la Verdad, y de una revista del mismo nombre.
Silvestre fue secuestrado en la mañana de ayer cuando se dirigía a los tribunales de San Pedro de Macorís para asistir a una audiencia sobre una litis con el fiscal de La Romana, José Polanco, quien lo había demandado por difamación e injuria debido a acusaciones hechas por el periodista sobre la supuesta relación del fiscal con casos de narcotráfico.
De acuerdo con las versiones recolectadas por las autoridades, el comunicador fue raptado en la cercanías de su hogar, alrededor de las 7:45 de la mañana, cuando se aprestaba a abordar su yipeta en el hotel J y A, ubicado en la intersección de las calles Fray Juan de Utrera con Gastón F. Deligne, por cuatro hombres que le golpearon y luego le dispararon al estómago.
Su cadáver fue hallado horas después próximo a un estanque de agua, en la comunidad El Peñón en la carretera La Romana-San Pedro de Macorís.
Por su muerte han sido detenidas unas 10 personas que se tenían como “testigos oculares” del caso.
El jefe de la Policía Nacional, general José Armando Polanco Gómez, quien viajó ayer a esta ciudad y habló con periodistas locales, expresó que el caso era “complejo y difícil”, dejando en manos de los investigadores las pesquisas y comprometiéndose frente al presidente del Colegio Dominicano de Periodistas (CDP), Aurelio Henríquez a llegar hasta los responsables del crimen.
Oficiales e investigadores de la Policía llegaron a la Dirección Regional Sureste de la PN para investigar sobre el caso.
El comunicador, cuyo cuerpo fue entregado ayer a sus familiares para su sepultura -que será efectuada hoy- luego de una autopsia en el Instituto de Patología Forense, se aprestaba a poner a circular el ultimo número de su revista quincenal La Voz de la Verdad, esta semana, adelantando que sacaría detalles sobre casos vinculados con el narcotráfico.
Silvestre, quien dejó en la orfandad a 11 hijos, era un periodista persistente y controversial, que “no barajaba pleitos”. Residió por varios años en Estados Unidos.
Su programa, La Voz de la Verdad, que producía de lunes a viernes a las 2:30 de la tarde por el Canal Caña TV, estaba fuera del aire desde hace alrededor de un mes, luego que el canal fuera arrendado al pastor Ezequiel Molina hijo.
Lo denunció al CDP
Silvestre denunció la pasada semana, en llamada al CDP, que un vehículo lo perseguía y que debió tomar una vía contraria, subirse a la acera y entrar al supermercado Jumbo de La Romana, para despistar a sus perseguidores a quienes no identificó.
Su denuncia
Silvestre había adelantado que conocía sobre la muerte de un comerciante y su chofer, frente en un centro cervecero propiedad del primero, ocurrido el pasado 14 de julio en un suceso relacionado con un supuesto ajuste de cuentas. El hecho ocurrió frente al centro de diversión “D’ Momón Súper Frías”, en la calle Espaillat casi esquina Gregorio Luperón y resultaron muertos Ramón Herrera (Momón) y Freddy Castillo (El Socio), mientras fue herido un hombre sólo conocido por “Cheché